Lorenzo Ghiberti (1378-1455) Arte
1 Un visitante nos comenta
Reúne las características del verdadero artista del Renacimiento al ser al mismo tiempo diestro escultor, broncista, orfebre, arquitecto y escritor. Su obra más sobresaliente la constituyen las puertas del baptisterio de Florencia. La construcción de esta obra se le adjudica por concurso en el que se enfrenta a Brunelleschi. Destina la mayor parte de su vida a las puertas; la ejecución de la primera, dedicada a la vida de Jesús, le toma 20 años (1403-1424) y en ella rompe con la tradición gótica e innova con la forma del modelado. En la segunda invierte 27 años (1425-1452), obra maestra dedicada al Antiguo Testamento, en la que figuran más de cien personajes que incluyen figuras humanas desnudas, con ropajes y animales. Sobresale de ellas el sacrificio de Isaac por Abraham. La transformación del estilo, entre el período de la primera y el de la segunda, marca el paso del gótico tradicional del período Trecento al humanismo del Renacimiento. Medio siglo después, Miguel Ángel dirá que sus puertas son dignas de ser las del Paraíso. Su vida y sus ideas han llegado a nuestros días a través de su autobiografía Comentarios, donde expresa su búsqueda por el conocimiento del comportamiento de la naturaleza para descubrir la concepción de las pinturas, el mecanismo de la vista y la forma como pueden determinarse los cánones de las artes plásticas. Otras esculturas sobresalientes son San Juan Bautista (1414), San Mateo y San Esteban (1428, las tres en la iglesia de San Miguel, Florencia), relieves en bronce para la fuente bautismal de Siena, la lauda sepulcral de fray Leonardo di Stagio Dati (1427, Santa María Novella), entre otras.